CARACAS, martes 24 de noviembre, 2009
"Después de esperar media hora en la estación Petare, el vagón circuló hasta La California con las puertas abiertas. Allí lo mandaron a desalojar", cuenta la vendedora.
A las 10 y 20 de la mañana esta estación era un hervidero de personas desesperadas que tuvieron que recurrir al transporte público terrestre para llegar hasta sus destinos o al menos hasta la estación del metro más cercana, que funcionaba con retraso.
Poco más de 20 minutos se tardaron los técnicos en subsanar la falla en el sistema de puertas. Mientras dos trenes esperaban en cola en ambos sentidos en la estación La California.
El colapso y la confusión reinó hasta después de las 12 del mediodía de ayer, debido a la fuerte congestión de los andenes por la gran afluencia y presencia de personas en las estaciones de la Línea 1.
Voceros de la empresa informaron que el servicio no se paralizó sino que se prestó con retardo mientras se subsanaba el problema que se presentó pasadas las 10 de la mañana, hora en que todavía el flujo de usuarios es importante.
Sin embargo, no suministró detalles sobre el origen de la falla. "Todos los días debemos soportar retrasos. Ya no se puede confiar en el sistema para llegar a tiempo al trabajo", comentó Fátima Gomes, quien trabaja en Los Dos Caminos y ahora aborda la estación Capitolio a las 6:45 a.m. para poder llegar a las 8 a.m. a su destino, previendo el retraso de todos los días.
El vagón del Metro circuló de Petare a La California con las puertas abiertas.
El viacrucis en el que se ha convertido trasladarse por estos días en el metro de Caracas le significó ayer a Berta López llegar a su trabajo en Plaza Venezuela con dos horas y media de retraso."Después de esperar media hora en la estación Petare, el vagón circuló hasta La California con las puertas abiertas. Allí lo mandaron a desalojar", cuenta la vendedora.
A las 10 y 20 de la mañana esta estación era un hervidero de personas desesperadas que tuvieron que recurrir al transporte público terrestre para llegar hasta sus destinos o al menos hasta la estación del metro más cercana, que funcionaba con retraso.
Poco más de 20 minutos se tardaron los técnicos en subsanar la falla en el sistema de puertas. Mientras dos trenes esperaban en cola en ambos sentidos en la estación La California.
El colapso y la confusión reinó hasta después de las 12 del mediodía de ayer, debido a la fuerte congestión de los andenes por la gran afluencia y presencia de personas en las estaciones de la Línea 1.
Voceros de la empresa informaron que el servicio no se paralizó sino que se prestó con retardo mientras se subsanaba el problema que se presentó pasadas las 10 de la mañana, hora en que todavía el flujo de usuarios es importante.
Sin embargo, no suministró detalles sobre el origen de la falla. "Todos los días debemos soportar retrasos. Ya no se puede confiar en el sistema para llegar a tiempo al trabajo", comentó Fátima Gomes, quien trabaja en Los Dos Caminos y ahora aborda la estación Capitolio a las 6:45 a.m. para poder llegar a las 8 a.m. a su destino, previendo el retraso de todos los días.
0 comentarios:
Publicar un comentario